Manual de limpieza dental en casa
Este Manual de Higiene Dental viene para aclarar todas las dudas que puedas tener acerca del cepillado.
La limpieza dental consta del cepillado de los dientes para eliminar la mayor cantidad de placa bacteriana de nuestra boca. Esta placa se define como una capa de bacterias que se adhieren sobre la superficie de los dientes, encía, lengua, prótesis y cualquier tipo de restauración.
La placa bacteriana constituye el principal factor detonante de las dos enfermedades bucodentales que más nos afectan: La CARIES y la ENFERMEDAD PERIODONTAL, por lo que controlarla es la principal medida preventiva para no sufrirlas.
Si no se retira adecuadamente mediante una buena higiene bucal, la placa bacteriana se mantendrá en la boca e irá evolucionando con el tiempo. Cada día que pase será más dañina y más difícil retirarla ya que irá absorbiendo calcio de nuestra propia saliva endureciéndose hasta formar lo que llamamos SARRO. Una vez se haya formado solo podrá retirarse mediante una limpieza profesional.
Es importante saber que la placa bacteriana se genera continuamente y no depende de si comes o no por lo que aunque no lo hagas, debes mantener los cepillados de la noche y mañana.
Normas para conseguir una boca sana
+ CONTROLAR LA DIETA: Todos sabemos que el azúcar, y los carbohidratos, en general, producen caries. Pero el control del azúcar en nuestra dieta no es lo único que podemos hacer para mejorar nuestra salud bucodental, es también muy importante controlar la frecuencia con la que comemos.
Picar entre horas deja restos de comida en nuestra boca que no eliminamos hasta el cepillado que hacemos tras las comidas principales. Además, solemos picar cosas pegajosas como el pan, las patatas fritas, dulces, bollería industria, bebidas azucaradas o “alimentos” similares provocando:
+ Un aumento continuo de la acidez de nuestra saliva sin llegar a estabilizarse debilitando nuestro esmalte siendo así más fácil la aparición de caries.
+ Restos adheridos imposibles de retirar con la limpieza natural que realiza nuestra saliva al moverse.
+ MANTENER UNA LIMPIEZA DENTAL EFICIENTE Y EFICAZ: El control de la placa bacteriana en casa es esencial para prevenir la aparición de caries y enfermedades periodontales. Para ello usaremos diferentes herramientas como son el cepillo dental, la seda o cinta dental, los cepillos interproximales y el irrigador dental.
En algunos casos nos apoyaremos de un control químico mediante colutorios formulados especialmente para ello y que tu odontólogo o higienista te recomendarán.
¿Cuántas veces nos tenemos que cepillar?
La respuesta más común es 3 veces al día tras las comidas principales. Pero si tienes tendencia a tener caries y deberías realizar la limpieza dental cada vez que comemos aunque sea un cepillado rápido para retirar los restos de comida he intentar bajar la acidez de la saliva. Siempre con suavidad y no más de 2-3 min.
Hay que tener muy en cuenta que los cepillados más importantes son el de la noche y el de la mañana porque aunque nos hayamos acostado con la boca limpia de placa bacteriana, es durante el sueño donde más se genera al bajar el flujo salival que nos protege.
Técnicas de limpieza dental:
1 – LIMPIEZA INTERDENTAL: Si imaginamos que nuestra boca es como una casa, seguramente lo primero que haces al limpiarla es quitar de en medio los cacharros grandes que impiden retirar bien el polvo o barrer a fondo. En la boca estos cacharros son los trozos de comida que quedan entre los dientes. Seguro que según lo que comas, notas como te queda comida en esos espacios que te incomoda y te cuesta retirar con el cepillo dental. Por no decir que a veces es totalmente imposible y es aquí donde entran las herramientas para limpiar los espacios interdentales.
+ Cinta dental: En clínica Dr. Rull recomendamos siempre el uso de la cinta dental en contra de la seda dental. La primera es plana y cuesta mucho menos de pasarla entre los espacios interdentales que suelen ser bastante reducidos. La segunda es cilíndrica y está formada por varios filamentos lo que hace que tengas que hacer más fuerza al pasarla siendo más fácil dañarte la encía.
Tienes que tener paciencia al iniciarte en esta técnica porque al principio cuesta bastante así que tómatelo con calma, no pasa nada si tardas un tiempo en adquirir el hábito, mejor una curva de aprendizaje lenta y segura que desistir al segundo intento por sentir frustración. Al principio aprende jugando, frente al espejo para verte bien, empieza pasándola en dos sitios en vez de toda la boca. Ve probando porque cada boca es diferente y tiene necesidades diferentes. Verás como en menos tiempo del que crees ya te pasas la boca entera sin esfuerzo.
Te enseñamos la técnica base de limpieza dental interproximal:
1. Corta un trozo de hilo de unos 50cm enrollando los dos extremos en los dedos corazón, dejando una zona de unos 20cm de hilo tenso entre ambos dedos.
2. Con los dedos índice y pulgar de cada mano manejarás el hilo siempre con suavidad y sin ejercer fuerza para no dañar la encía, se introduce entre los dientes con un movimiento de sierra, hacia delante y hacia atrás, hasta pasar la zona de contacto que hay entre los dientes.
3. Una vez pasada esta zona, notarás que el hilo queda suelto y podrás amoldarlo al diente de atrás. Piensa que los dientes tienen una forma más o menos circular, no son rectos por lo que hay que abrazar al diente para asegurar de limpiar la mayor parte posible del mismo.
4. Introducimos con suavidad el hilo entre la encía y el diente, no debe doler en ningún momento, y lo subiremos repitiendo el mismo movimiento varias veces antes de ir al de delante. Y así en cada uno de tus dientes.
+ Cepillos interproximales: Esta herramienta está pensada para la limpieza dental de los espacios interdentales más grandes como los que provoca la enfermedad periodontal. Para la limpieza de prótesis como coronas sobre implantes o puentes y para los que lleven aparatos de ortodoncia para limpiar entre brackets.
Hay de varios diámetros y formas que te enseñaremos en clínica. Te recomendaremos el que mejor se adecue a tus necesidades, como normal general será aquel con el que sientas más comodidad y con el que no tengas que hacer fuerza para pasarlo.
Se pasará tanto por delante como por detrás sin hacer fuerza e intentando que el cepillo interdental tenga el mayor contacto posible con la línea de la encía y el diente. Con varios movimientos de vaivén de fuera a adentro y viceversa en cada espacio entre tus dientes.
2 – CEPILLADO DENTAL: Una vez limpiado los espacios interdentales, pasamos a cepillar el resto de la línea de la encía y dientes mediante un correcto cepillado.
Según los estudios la limpieza dental con cepillo eléctrico es un poco más eficaz retirando la placa bacteriana siempre y cuando se use de manera correcta. Aunque es difícil cepillarse siempre con el eléctrico ya que normalmente nos cepillaremos manualmente cuando no estemos en casa por lo que explicaremos las dos técnicas.
+ Manual:
El cepillo debe adaptarse a las necesidades individuales de tamaño, forma y aspecto (para los niños es mejor que sean divertidos). No deben ser porosos para que no absorban humedad, deben ser fáciles de limpiar y económicos ya que deberán cambiarse cada 2-3 meses debido al desgaste y a la colonización bacteriana.
El mango debe ser apropiado a la edad y destreza de cada uno, el tamaño de la cabeza debe adaptarse al tamaño de la boca.
Los filamentos serán sintéticos, con punta redondeada y mejor de dureza intermedia siempre que no haya problemas de encía muy fina o heridas.
Técnicas de limpieza dental con cepillo manual: El cepillado de la noche y el de la mañana son los más importantes del día por lo que les prestaremos especial atención intentando mantener la concentración los 2-3 minutos que dure el cepillado.
Siempre nos cepillaremos con la boca ligeramente abierta para facilitar el acceso a las zonas más posteriores sin que la musculatura de las mejillas nos moleste y siempre comenzaremos por molares ya que son las zonas más difíciles.
Recuerda ir cambiando de zona de inicio para no empezar siempre por la misma ya que es normal que durante el cepillado aunque intentemos mantener la concentración, esta decaiga siendo cada vez menos efectivo. Cambiando de zona de cepillado, siempre comenzando por los molares, evitaremos este problema.
Dividiremos la boca en 4 cuadrantes y te recomendamos que sigas siempre el mismo sistema. Así, aunque cambies el cuadrante en el que comienzas, no te dejarás ningún sector sin cepillar. Por ejemplo, empieces donde empieces, sigue la dirección de las agujas del reloj y dedica a cada cuadrante no menos de 30seg.
A continuación explicaremos las 3 técnicas de limpieza dental más conocidas y efectivas para lograr un buen cepillado, piensa que tu boca tiene rincones, curvaturas y que cada uno tiene una habilidad diferente por lo que prueba las tres para ver cual se amolda mejor a tus necesidades, puede que tengas que utilizarlas todas para lograr llegar a todos esos rincones.
+ Cepillo eléctrico: El cabezal de los cepillos eléctricos es más pequeño y el cuello mucho más largo por lo que nos permite llegar mejor a zonas de difícil acceso. Hay diferentes modelos de cepillos eléctricos; giratorios, oscilatorios, vibratorios, sónicos… Busca el que mejor se adapte a tus necesidades y gustos.
Existe la creencia de que este tipo de cepillos pueden dañar el esmalte o la encía, no es cierto, hay estudios al respecto que aseguran que no hay diferencia entre el cepillo eléctrico y el manual siempre y cuando el cepillado sea adecuado. Lo que daña el esmalte y la encía es cepillar con una fuerza excesiva.
Al igual que en el cepillado manual, dividiremos la boca en 4 cuadrantes y comenzaremos cada noche por los molares de un cuadrante diferente, con la boca ligeramente abierta.
No hace falta que uses mucha pasta y repártela por todos los dientes antes de encender el cepillo. Coloca el cepillo sobre la cara externa de los dientes sobre la línea de la encía con el cabezal ligeramente inclinado hacia la misma y deslízalo de diente a diente dejando un momento para que el cepillo limpie cada uno.
El secreto de una buena limpieza dentla con cepillo eléctrico es tener paciencia para dejar que el haga su trabajo sin moverlo como si fuera un cepillado manual.
Después de la cara externa, limpiaremos de la misma manera, la zona de los dientes que muerde o zona oclusal, la zona interna y no olvides darle una pasada suave a tu lengua.
Es muy importante cepillarte sin hacer demasiada fuerza, da igual si usas cepillo manual o eléctrico, siempre debes hacer un cepillado enérgico pero sin llegar a deformar el cepillo.
Piensa que están diseñados para limpiar con las puntas de los filamentos, si los deformas al hacer demasiada fuerza, es el cuerpo de las cerdas lo que entra en contacto con los dientes y encía. Por lo tanto, no retirará la placa bacteriana, dañará tu encía o esmalte provocando recesiones, sensibilidad y problemas estéticos.
Como norma general es recomendable usar pasta o gel dental con flúor para ayudar a la recalcificación del esmalte y reducir la aparición de caries. Hay pastas de dientes más específicas pensadas para tratar algún problema como la sensibilidad, halitosis, manchas… Si tienes alguna duda al respecto de qué pasta de dientes puede ser mejor para ti, no dudes en consultarnos.
Si te es incómodo cepillarte la lengua, hay herramientas que te pueden ayudar como el raspador lingual que puedes encontrar en cualquier farmacia.
Es recomendable que después de cada uso laves y seques tu cepillo para que acumule la menor cantidad de bacterias posible.
3 – USO DE COLUTORIOS: Los colutorios son un complemento al cepillado dental que nos ayudarán en la prevención y tratamiento de diferentes afecciones bucales.
Los colutorios de tratamiento son una ayuda para diferentes problemas bucales como las infecciones bucales, las caries activas, halitosis, boca seca o xerostomía, sensibilidad, sustitución del cepillado tras una cirugía oral… Será tu odontólogo o higienista el que te lo prescriba y te dé les indicaciones de como utilizarlo.
Los colutorios de mantenimiento o prevención los usamos cuando tenemos salud bucal y queremos mantenerla, en estos casos el uso de colutorios es opcional, todo el mundo puede usarlos pero se recomiendan especialmente a personas que tienen un equilibrio en su salud bucal más frágil. Por ejemplo, en personas con enfermedad periodontal controlada o personas que hayan tenido muchas caries.
En cualquier caso, siempre recomendamos usar enjuagues sin alcohol, que respeten la mucosa bucal y que se adecuen a tus necesidades. Sigue las instrucciones del fabricante siempre teniendo muy claro que son una ayuda y que no sustituyen al cepillado a no ser que te lo prescriba tu odontólogo como en el caso de las cirugías. Si tienes alguna duda al respecto, estaremos encantados de ayudarte y asesorarte.
4 – IRRIGADOR BUCAL: El irrigador bucal es un aparato que proyecta un chorro de agua u otra solución pulsátil a presión que dirigiremos a nuestra encía y dientes. Se trata de una herramienta muy útil para ayudarnos en nuestra higiene diaria siempre y cuando se use adecuadamente.
Lo más importante es saber que el irrigador no sustituye al cepillo, lo complementa. Nos va a ayudar a retirar restos de comida y placa bacteriana controlando así la inflamación de las encías o la aparición de caries.
Debemos saber que tiene sus limitaciones ya que no llega a limpiar en profundidad los espacios interdentales en personas con contacto entre sus dientes, para estos casos se debe usar junto a la cinta dental o los cepillos interdentales.
Está especialmente indicado en personas con alta prevalencia de caries, enfermedades periodontales, problemas de movilidad, halitosis y con tratamientos ortodónticos como los brackets. En estos casos, los beneficios son notables y constatables desde el primer uso.
Como verás es muy sencillo utilizarlo:
1. En primer lugar deberás seleccionar la boquilla que más se adapte a tus necesidades. Siempre es mejor comprar un irrigador con diferentes tipos de boquillas para que nos den soluciones adecuadas a diferentes problemas.
2. Puedes rellenar el depósito con agua fría o tibia o mezclándola con algún colutorio.
3. Selecciona el nivel de presión del agua. Lo suficientemente potente para que notes un buen masaje pero sin que llegue a doler.
4. Coloca el irrigador dental en un ángulo de 90 grados respecto a tus encías
5. Recorre con el irrigador la base de tus encías y los espacios interdentales. Repasa las zonas que más restos de comida acumulen y si lo necesita usa las cánulas especiales según las necesidades de tu boca.
6. Limpia el irrigador y vacía el depósito de los restos de agua no usada para evitar fugas.
Si eres constante con tu higiene diaria y vienes a tus revisiones anuales, verás como tu salud bucal mejorará en muy poco tiempo y la mantendrás a lo largo de toda tu vida. Para nosotros la prevención es fundamental para evitar problemas mayores por lo que no dudes en acudir a nosotros en busca de ayuda u orientación.
Este MANUAL DE LIMPIEZA DENTAL ha sido realizado por nuestra compañera Patricia Vacas.
Contacto de lunes a viernes:
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Odontólogo, especialista en estética dental, endodoncia, peridoncia e implantes.
Licenciado en la Universidad Europea de Madrid desde el año 2008.